jueves, mayo 31, 2007

Ensalada de rúcola...

Pienso, camino largamente, mi vida antes de ti.
(Neruda)
La rúcola me recuerda a los juegos de la infancia, cuando jugábamos a tiendas y tenderos. Recogíamos hierbajos que se convertían en filetes, flores que pasaban a ser frutas y con agua y tierra preparábamos batidos que luego nos compraba algún niño con piedras como moneda de cambio. La rúcola se parece mucho a aquellos filetes-hierbajos.

Dónde ha estado metida la rúcola tantos años que yo apenas hace tres que la conozco?

Su sabor intenso, algo amargo y delicadamente picantón, me tiene enamorada desde que la descubrí. Aliñada con oliva y aceto balsámico es un manjar. Pero también se integra bien con platos tibios o calientes como pizzas, risottos, salsas, bruschettas, cruda o ligeramente cocida, ya que no soporta una cocción prolongada.

Jamie Oliver es un forofo y prácticamente la usa para todo el tío.
De origen italiano, ya se usaba en ensaladas en la Antigua Roma. También llamada rucula, rucherra, rughetta, ruchetta, ruca, según las especies y los dialectos, su nombre científico es eruca sativa. En Grecia fue citada por Dioscórides en el libro De Materia Libre Quinque, donde era recomendada para problemas digestivos. Los griegos la consideraban afrodisíaca y la utilizaban en fórmulas que incluían además sus jugos y semillas. Puede tener hojas dentadas o lisas, pero siempre es olorosa y acidulada.
En Londres la comimos en bocadillo de pan caliente con queso de cabra, pimientos de tres colores y mermelada de frambuesa.
Riquísimo !!
En la foto en ensalada con tomate Raf, queso de rulo de cabra, aceite de oliva, aceto balsámico de Módena y caviar. Ya sabéis para dar salida a ese caviar iraní y beluga que se nos amontona en la nevera.
Si no sois del mismo centro de Bilbao podéis usar el sucedáneo, no es lo mismo pero...

9 comentarios:

Carmen dijo...

Un clásico en mi dieta, aunque desde bien pequeñita tengo manía al del tomate, me gusta su sabor y su olor pero no tolero su textura, lo prefiero en zumo o en salsa...
Besos

delantal dijo...

jajajajajjaja
vaya¡ hay que ser del mismo centro de Bilbao.

;)
tiene una pinta essssstupenda

Camille dijo...

Carmen,
puede ser..ahora que te leo sí que es cierto que el tomate tiene una textura difícil. El zumo de tomate me encanta con sal, pimienta y sssshhhh unas gotitas de vodka ja ja ja

Besos guapísima


delantal,
gracias, estaba riquísima !

Juanjo Montoliu dijo...

Una pinta buenísima. A mí me entusiasma el tomate. El problema es encontrarlos dulces fuera de temporada. En cambio el caviar no me dice nada.

¡Qué aproveche!

Pedro M. Martínez dijo...

Ya, si paso por ahí casi todos los días. Estaba a tope. Después de empujar a media barra probé la(s) croqueta(s). Tenías razón, deliciosas. Y el tío, un borde.

Por cierto, he tomado mucha rúcola en Italia (en Roma y también en Florencia).
Besos.

Unknown dijo...

que buena descripcion de la rucola, a mi tambien me gusta mucho, la ensalada se ve muy saludable
saludos

Anónimo dijo...

La ruccola ha estado toda la vida entre nosotros, solo que no la llamábamos por ese nombre tan posh, sino por sus nombres en castellano, ruqueta o jaramago.

El verdadero punto de esta verdura es cogerla directamente de la mata y descubrir que pica como una guindilla. Picor que va perdiéndose con el tiempo.

Y en cuanto a esos filetes de hierbajos...Probablemente fuesen dientes de león -si, esos que tienen las flores esféricas que cuando las soplas salen volando mira la web de Mugaritz. Y que también se han usado toda la vida en las ensaladas, prueba y verás.

Unknown dijo...

Hola te he nominado para una especie de juego que lo llaman NEME, consiste en una cadena de visitas por los blog, en el mio encontraras las instrucciones
saludos

Raquel dijo...

Yo descubrí la rúcola hace dos años aquí en Italia y está buenísima!!
Besos.